Carla Rodríguez Miranda, de Las Agustinas; Ilenia Rodríguez Pérez, del Colegio Diocesano; y Esther Delgado Polo, del Colegio Tierrallana, han sido los tres alumnos ganadores del concurso provincial ‘Ayúdanos a eliminar el hambre y el despilfarro de alimentos’ que, por tercer año consecutivo, ha organizado el Banco de Alimentos de Huelva.

Estos dibujos participarán en el certamen nacional que organiza la Fesbal (Federación Española de Bancos de Alimentos), que agrupa a los 56 Bancos del país, a través de su cátedra en la Universidad Politécnica de Madrid y cuyo ganador se conocerá en el mes de octubre.

El concurso organizado por el Banco de Alimentos de Huelva se enmarca en la iniciativa de formación en solidaridad y no despilfarro que el Banco ha llevado a cabo durante el curso por varios centros de enseñanza de la provincia, que han totalizado una entrega de 380 dibujos, sobre los cuales un jurado local ha otorgado a cada colegio un premio por curso y un galardón al mejor de cada centro y, sobre éstos, se ha elegido a los tres mejores que van a optar al concurso nacional.

Los dibujos de Carla, Ilenia y Esther han sido elegidos por el jurado designado por el Banco de Alimentos de Huelva, conformado por el pintor Manuel Banda, la profesora María de la Peña, Francisco Martínez y el presidente del BAH, Juan Manuel Díaz Cabrera, quien ha querido agradecer el interés demostrado y la participación de los centros escolares y los alumnos.

El concurso, en el que han tomado parte alumnos de 3º, 4º, 5º y 6º de Primaria de Las Agustinas, Colegio Diocesano, Tierrallana, Funcadia y María Inmaculada, ha tenido como objetivo concienciar a los más pequeños acerca de la necesidad de evitar el despilfarro de alimentos.

El Banco de Alimentos de Huelva es una organización benéfica sin ánimo de lucro que tiene como principal finalidad la consecución gratuita de alimentos de toda clase para su donación y distribución posterior a unas 75 entidades benéficas de toda la provincia.

El BAH continúa atendiendo a cerca de 15.000 personas a través de los alimentos que se donan y distribuyen gracias a la labor de sus 65 voluntarios, que son la columna vertebral de la entidad. De hecho, 2016 se cerró con 2,7 millones de kilos de alimentos recogidos, frente a los 2,3 que se recogieron en 2015.